De luz y de sombra

Usamos la luz para iluminar espacios y facilitar el uso del mismo, pero no debemos olvidar la importancia que tiene la luz en nuestros proyectos, de hecho en D3 Design entendemos que hay que tratar la luz como un elemento decorativo más y, en ocasiones, incluso arquitectónico.

Podemos crear puntos de atención, marcar itinerarios, separar virtualmente espacios e incluso conseguir efectos dramáticos con el correcto uso de la luz. De la misma manera la sombra es una de las grandes olvidadas a la que debemos dar valor.
Desde el punto de vista teórico podemos diferenciar los siguientes tipos de luces:

• Luz frontal: Situada arriba y de frente, formando una pequeña inclinación. Proporciona una buena iluminación y no resalta el volumen, por el contrario, lo hace todo más plano.
  Es ideal para iluminar el baño en el área del espejo donde es mejor colocarla entre el espejo y el sujeto, evitando cualquier sombra sobre la cara.

Imagen: Archiexpo

• Luz de contra: Ilumina desde atrás hacia delante, resalta muy bien el volumen, crea misterio y atmósfera.

• Luz cenital: Ilumina perpendicularmente desde arriba y puede estar dirigida hacia un elemento concreto, es muy dramática, acentúa muy bien lo que se quiera resaltar, dirige la atención hacia un punto en concreto. En un pasillo crea ritmo.

Imagen: Bricolari

• Lateral: Resalta el volumen, pero sobre todo el movimiento. Produce efectos muy espectaculares en lugares donde lo que interesa resaltar es el movimiento de personas.

Imagen: Phillips

• Luz de candilejas: Es las que se sitúa en el suelo y produce muchos contrastes de sombras, con la tecnología leds puede crear ambiente, es muy útil en exteriores y escaleras.

Imagen: Ledinglab

• Proyectada decorativa: Este tipo de luz simplemente tiene función decorativa y posee gran peso estético.